La cooperativa Provincial de Badajoz de transporte, Copttraba, empezará la construcción de sus nuevas instalaciones en el primer trimestre del 2024, una parcela de 58.000 metros cuadrados y otra en reserva para una posible ampliación de 40.000 metros cuadrados en el Polígono Carrascal de Talavera de la Reina (Badajoz). Para ello, invertirá más de 8 millones de euros de fondos propios, como bien ha afirmado a Eleconomista.es su presidente Rafael Rodríguez.
Las nuevas instalaciones serán «modernas, funcionales y sostenibles, diseñadas para cumplir con las necesidades específicas de la empresa y de la industria del transporte terrestre en general». El diseño de las instalaciones incluirá una zona de aparcamiento para vehículos de transporte terrestre para 250 camiones, un centro de mantenimiento y reparación de vehículos, cuatro surtidores de carburante, nave y zonas de almacenamiento. Todo ello estará construido con materiales y tecnologías sostenibles, lo que permitirá reducir el impacto ambiental de las instalaciones.
Copttraba nació en 1964 en Gévora (Badajoz) y actualmente la forman 80 socios que tienen cada uno entre 1 y 5 camiones, una unión de pequeños autónomos con una flota de 180 vehículos en carreteras haciendo rutas de mercancías en toda la Península Ibérica. Sus inicios fueron como una central de compras de recambios para la automoción, según explica su gerente, Felipe Jiménez, pero pronto se vio la oportunidad de aprovechar su logística para agrupar a los transportistas, taxistas, conductores de ambulancia o autobuses.
Con esta fórmula, estos autónomos del transporte empezaron a operar debajo de este paraguas cooperativo para defender sus derechos y organizarse en una de las mayores cooperativas del sector en Extremadura y en España. Rafael Rodríguez destaca que en los inicios vieron la necesidad de asociarse, porque todos son pequeños autónomos transportistas que no podían competir en igualdad de condiciones con otras empresas, así bajo está formula pueden garantizar su servicio desde una escala más competitiva.
En estos momentos se dedican al transporte de cargas completas de mercancías en general y de mercancía a granel sólido entre España y Portugal. Felipe Jimenez destaca que durante un tiempo operaron por el resto de la Unión Europea, pero a través de la crisis de 2008 y la situación crítica que vivieron muchos transportistas españoles decidieron cerrar su ámbito de actuación a la Península Ibérica.
Con una facturación neta de 23.5 millones de euros miran al futuro con una perspectiva de crecimiento del 6%, en estos momentos mantiene más de 200 puestos de trabajo directos y más de 400 indirectos, pero una cifra pudiera ser superior debido al repunte adicional que esperan con las nuevas instalaciones, que pretende albergar 250 vehículos pesados.
